Sobre las dudas que se plantearon desde el radicalismo acerca de un potencial atentado al vicepresidente, el Jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, desestimó tal posibilidad y volvió a tratarlo de desleal con el proyecto del Frente para la Victoria.Y dijo que Cobos no tiene chances de ser Presidente.
La polémica entre el Gobierno Nacional y el vicepresidente, Julio César Cobos, continúa latente. La semana pasada, el dirigente radical Hipólito Solari Yrigoyen alertó sobre la posibilidad de que Cobos sufriese un atentado. Hoy, el jefe de Gabinete salió al cruce de esa versión: “Esta semana alguien dijo que podían atentar contra Cobos. El único atentado que puede haber contra Cobos es que lo pise la máquina de pisar traidores. ¿Qué otra preocupación puede tener?”, fustigó Fernández.
En declaraciones a Radio La Red, el jefe de ministros volvió a atacar al Vicepresidente, que en 2007 integró la fórmula presidencial del Frente para la Victoria junto con Cristina Fernández, al señalar que el mendocino trata de “erigirse en el jefe de la oposición” con la intención de ser “candidato a presidente” en 2011.
“Pero no lo va a ser. Nadie es tan tonto en este país para no darse cuenta los valores que tiene cada uno”, advirtió Aníbal Fernández, quien recordó que Cobos trabajó en contra de cada uno de los proyectos del Gobierno a partir de su “voto no positivo” a la Resolución 125 durante el conflicto con el campo.
Y volvió a confirmar el jefe de Gabinete que presentará una querella en contra de Pino Solanas, al que trató de “impresentable, oportunista, un bienudo que la va de peronista”. “A este tipo le tengo cero respeto. No se volvió gorila, nunca fue peronista”, añadió. Y recordó el episodio del incendio de la formación del tren Sarmiento en la estación Haedo, ocurrido en septiembre de 2008, cuando Fernández estaba al frente del Ministerio de Justicia.
“Cuando yo hablé de la quema de los trenes, nunca lo acusé a él, los partes me decían que eran grupos cercanos a su esquema político, no hago otra cosa que transmitir un parte policial”, relató el jefe de ministros.
Repitió también su condena a los escraches a periodistas que aparecieron la semana pasada en algunos afiches (“No da ningún tipo de ventajas o soluciones, no estoy de acuerdo”), aunque negó que se trate de un ataque sistemático: “No veo que sea una andanada contra los periodistas”.
Para el final, ensayó un mea culpa sobre el enfrentamiento que tuvo con la vedette Amalia Granata en el programa Un mundo perfecto, de Roberto Pettinato. “Yo fui a un programa a hablar de cualquier cosa menos de política, pero contesto igual –comentó Fernández–. Nunca me imaginé una salida de esas características. No le importa a nadie (lo que pasó). Esto sirve para demostrar que uno no se las sabe todas. Fui con toda la honestidad del mundo, fui ‘con los globos en la mano’ y me encontré con una situación absolutamente desagradable.”
